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martes, 3 de mayo de 2011

Sin violencia individual no hay violencia colectiva


 Hoy puede que no te des cuenta de ello, pero un día, cuando te vuelvas más consciente, entonces dirás, "¡Dios mío! Esta herida fue infligida por mí --sobre mí mismo". Habías dañado a otra persona pensando que las personas son diferentes. Nadie es diferente. La existencia entera es una, una unidad cósmica. De esta comprensión surge la no-violencia.
Osho 


Al igual que muchos expertos en el estudio de la conducta humana, soy una convencida de que las manifestaciones de violencia social, como la delincuencia, las guerras y el terrorismo, constituyen la expresión a gran escala de la violencia individual sumada y cuyo origen se observa en la calidad de los vínculos dentro del hogar durante la crianza y la convivencia.

Es muy fácil darse cuenta de cómo el mundo se encuentra terriblemente afectado por  la violencia, lo difícil es darnos cuenta de cómo la violencia forma parte de cada uno de nosotros. Acusamos violencia en los demás, al tiempo de invisibilizar la violencia que hay en cada uno de nosotros, con el resultado de quedar todos apabullados en un círculo de autodestrucción.

Respondemos a la violencia, con más violencia. Justificamos el daño, el insulto, el maltrato al prójimo desde el hecho de haber recibido lo mismo. Así, ojo por ojo, como decía Gandhi, nos vamos quedando todos ciegos...

Para acabar con el círculo vicioso de violencia y dar paso al círculo virtuoso de relaciones basadas en cultura de paz, compasión, respeto y dignidad, debemos comenzar por detenernos un momento y reflexionar sobre nuestra responsabilidad individual. Necesitamos de una vez por todas, en lugar de reaccionar ciegamente, sin pensar ni orientar constructivamente nuestras emociones, comenzar a hacernos responsables de ellas -  sean provocadas por la causa que sea-  y buscar salidas para encauzar su expresión sin dañar a otros o a nosotros mismos.

Si queremos cambiar este orden predominante de daño y autodestrucción, es imprescindible hacer autocrítica y admitir de qué modo con nuestra conducta en el diario vivir , contribuimos a sumar dosis infinitas de daño y violencia que luego se traducen en el caos, la delincuencia, las guerras, el terrorismo... que signan nuestro planeta y nos conducen hacia la depauperación de la calidad de vida y  hacia nuestra propia declinación como especie. Hacer el trabajo de autoconocimiento, autoevaluación y comprometernos en el objetivo de autotransformación individual, es la única vía posible para lograr que la cultura de paz, prevalezca sobre la violencia, comenzando por nuestra familia  desde donde todo parte y se derrama hasta la comunidad, el país, el planeta. 

 Pulsa el player y escuha el micro: Cuando la violencia está en cada uno de nosotros  

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Email: conocemimundo@gmail.com  

Twitter. @conocemimundo


3 comentarios:

  1. HOLA SOLO QUIERO FELICITARLOS POR LA PAGINA PERO SOBRE TODO POR QUE POR MEDIO DE ESTE SE PUEDE DAR UN CAMBIO PARA CREAR LAS CONCIENCIAS POSITIVAS DEL SER HUMANO Y LLEGAR A UNA VIDA CON ¨PAZ¨

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  2. Estimada Berna, me parece que usted ha estuadiado al investigador venezolano H. DUBRIC, creador de Quinto Sistema Gerencial y estudioso de la conducta humana, quien promueve un cambio a partir del individuo, a través de la destrucción del ego: ira, codicia, orgullo, violencia, etc, que es donde están las causas del deterioro e involución de la humanidad. El entrega de manera acertada la técnica de la auto observación y las técnicas para eliminar el ego para lograr el despertar de la Conciencia, sería bueno que señalara de manera expresa en sus disertaciones y escritos a este insige autor quien cuenta con 9 obras en su haber: Nacimiento de un Nuevo Ejecutivo, Virtud y Negocios, Etica y Moral Ejecutiva, Visión Estratégica, Efecto Dominó ¿Liderazgo?, Crisis y Futuro, Cómo Vencer la Corrupción y la Incertidumbre del Futuro, Quinto Sistema y la Gerencia Efectiva y Quinto Sistema Nuevo Orden Gerencial, ya que él es una fuente sólida para la transformación del individuo. Muy Atentamente, Isabel Amador. Caracas-Venezuela

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  3. Estimada Isabel:

    Ha tenido Ud una impresión equivocada. Primera vez que leo sobre el autor venezolano que Ud menciona. Es mi costumbre señalar las fuentes y los autores-as o especialistas de los que me nutro, por razones éticas y porque me interesa que la gente los conozca y los consulte para hacer que este trabajo educativo que llevo a cabo sea de impacto. De muchos autores y obras que he leído, termino decantándome por algunos en particular porque me hacen más resonancia. A estos autores suelo llamarlos "especialistas recomendados y frecuentemente citados" a través de todos los medios de difusión a mi alcance, donde también cito y recomiendo sus publicaciones que, en muchos casos, han comenzado a conocerse y leerse en Venezuela gracias al trabajo de divulgación que llevo realizando a lo largo de estos años. El autor venezolano que Ud menciona no forma parte de esa lista, entre otras razones, porque nunca lo he leído; ni siquiera lo conozco.

    En otro orden de ideas, la promoción del cambio a partir del individuo a través de la autoindagación y la compresión y manejo constructivo de las emociones no le pertenece a ningún autor en exclusiva y parte de distintas corrientes filosóficas y/o religiosas, muy antiguas principalmente orientales. Yo he dedicado más de siete años y muchos recursos a la búsqueda interior. He hecho psicoterapia, me he formado de la mano de terapeutas y maestros de meditación de la Multiversity de Osho ubicada en Puna, India. Soy discipula de Osho, líder de grupos de meditaciones activas y una buscadora impenitente del sentido de la vida y de mi propia esencia. Esos han sido los marcos de referencia que tomé para realizar esta entrada y muchas otras publicaciones a lo largo de mi desempeño profesional como periodista.

    Agradezco su interés, la observación y espero haberle aclarado el mal entendido.

    Cordialmente,
    Berna Iskandar

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